Te costó mucho convencerme para conocernos; tu insistías, y yo te daba largas. Algo me decía que no debía quedar contigo, que no me haría bien verte, pero por otro lado lo estaba deseando..... Y un día me decidí, quedamos a solas, habiéndonos visto solamente por una foto enviada por móvil, y apenas sin haber hablado; justo sabíamos nuestros nombres y que a ambos nos gusta jugar en nuestras relaciones......

Los dos estábamos nerviosos en nuestra primera cita, pero pronto congeniamos, y no parábamos de hablar hasta que tu me pediste un beso y me dijiste además que estabas deseando tocarme los pechos......no podías apartar la vista del escote de mi camiseta y me lo pedías a gritos con la mirada...y sonriendo, me acerqué a ti y busqué tu boca y tu la mía, tus manos fueron directas a mis senos y queriendo endurecer los pezones, me los pellizcabas, y yo busqué tu entrepierna, acariciando tu pene por encima del pantalón, y notando como iba creciendo a mi contacto....y tu mano pasó de mi pezón a estar dentro de mi pantalón, buscando mi sexo, y encontrándolo tan húmedo que no pudiste evitar la tentación de masturbarme allí mismo.....

En ese momento supe que estaba perdida, y que tú serias mi perdición....me gustaba ese juego de caricias, saliva y deseo que me atrapaba y me excitaba tanto, sin importar el lugar y que nos hacía perder la noción del tiempo, solo pensando en gozar, escuchar nuestros gemidos y devorarnos hasta caer rendidos.....